martes, 8 de febrero de 2011

A un mes del beso de despedida

Bienvenidos a mi blog:

En este espacio que he decidido crear voy a ir contando mis impresiones, vivencias y aquellas situaciones que me van a acompañar en mi aventura. La aventura de la búsqueda de un trabajo mejor, de una independencia y de comenzar una nueva vida casi desde cero en un país que me es desconocido. Bueno… desconocido hasta cierto punto, porque desde que era pequeña he “bebido” todo lo que caía en mis manos sobre Escocia. Ha sido una obsesión que he tenido desde que viera por primera vez sus paisajes, escuchara sus gaitas, soñara con sus castillos y, para que negarlo, viera a los escoceses en kilt.

A estas horas dentro de un mes, si no hay problemas, estaré aterrizando en la ciudad de las siete colinas del norte, aquella que llaman la Atenas del norte y la conocida como la ciudad más encantada de toda Europa.
Tengo que agradecer muy especialmente a la que va a ser mi anfitriona, ya que si no fuera por ella todo sería muchísimo más difícil. Esta amiga a la que desde que nos conocimos la llamo cariñosamente motes en gaélico como sassenach y cosas así que aprendí de un libro que le presté en el instituto. Un libro que ha pasado por casi todas mis amigas y que mis primas me regalaron hace más de doce años: Forastera. Gracias Mónica por tu hospitalidad por adelantado.

Queda aún un mes, pero ya está aquí el cambio. Tan cerca y tan lejos, con un noventa y cinco por ciento de ilusión y un cinco por ciento de miedo.
Hay una canción en especial que me viene bastante a menudo a la cabeza, ya que su letra representa muy bien aquello por lo que estoy pasando y lo que decido. Y con esto me despido.
Aquí os la dejo, http://www.youtube.com/watch?v=bWPIvMNxO9I&feature=fvst
Asique…
Dadme un beso de despedida, que voy a desafiar a la gravedad.